San Florián nació cerca del año 250 en la ciudad de Aelium Cetiumin, hoy conocida como Saint Pölten - Austria. Según la tradición era comandante del ejército romano en Baviera, siendo responsable de la brigada de bomberos.
Blog Educativo: Religión Católica. CEIP Luis Palacios Valdepeñas (Cuidad Real)
4 de mayo de 2025
SAN FLORIÁN
San Florián nació cerca del año 250 en la ciudad de Aelium Cetiumin, hoy conocida como Saint Pölten - Austria. Según la tradición era comandante del ejército romano en Baviera, siendo responsable de la brigada de bomberos.
DÍA DE LA SANTA CRUZ
La Invención de la Santa Cruz, en cambio, es conmemorada desde antiguo. En España aparece en todos los calendarios y fuentes litúrgicas mozárabes, poniéndola en relación con el relato del hallazgo por Santa Elena de la auténtica Cruz de Cristo. Este relato figura en los pasionarios del siglo X y puede resumirse así: En el sexto año de su reinado, el emperador Constantino se enfrenta contra los bárbaros a orillas del Danubio. Se considera imposible la victoria a causa de la magnitud del ejército enemigo. Una noche Constantino tiene una visión: en el cielo se apareció brillante la Cruz de Cristo y encima de ella unas palabras, In hoc signo vincis ("Con esta señal vencerás"). El emperador hizo construir una Cruz y la puso al frente de su ejército, que entonces venció sin dificultad a la multitud enemiga. De vuelta a la ciudad, averiguado el significado de la Cruz, Constantino se hizo bautizar en la religión cristiana y mandó edificar iglesias. Enseguida envió a su madre, santa Elena, a Jerusalén en busca de la verdadera Cruz de Cristo. Una vez en la ciudad sagrada, Elena mandó llamar a los más sabios sacerdotes y con torturas consiguió la confesión del lugar donde se encontraba la Cruz a Judas (luego San Judas, obispo de Jerusalén). En el monte donde la tradición situaba la muerte de Cristo, encontraron tres cruces ocultas. Para descubrir cuál de ellas era la verdadera las colocaron una a una sobre un joven muerto, el cual resucitó al serle impuesta la tercera, la de Cristo. Santa Elena murió rogando a todos los que creen en Cristo que celebraran la conmemoración del día en que fue encontrada la Cruz, el tres de mayo.
En cambio, de la celebración popular de la fiesta de la Santa Cruz, la que más nos interesa, apenas hay datos antiguos. Los primeros testimonios que conocemos se remontan tan sólo al siglo XVIII, aunque este vacío documental no implica necesariamente que la fiesta no existiera desde antes. En cualquier caso, parece que la celebración popular de la Cruz de Mayo tal como hoy la conocemos alcanzó su máximo esplendor durante los siglos XVIII y XIX, para empezar a decaer a principios del XX.
Esta fiesta, en su vertiente popular, está muy extendida por toda España, aunque con variaciones muy significativas de unos lugares a otros. A pesar de ello, la celebración presenta en todas sus manifestaciones una serie constante de elementos comunes. El centro de la fiesta es una cruz, de tamaño natural o reducido, que se adorna, en la calle o en el interior de una casa, con flores, plantas, objetos diversos (pañuelos, colchas, cuadros, candelabros, imágenes de santos, etc.) y adornos elaborados. A su alrededor se practican bailes típicos, se realizan juegos y se entonan coplas alusivas. A veces hay procesiones, de carácter religioso o pagano. A la hora de establecer los orígenes de esta celebración popular de la Cruz hay que referirse necesariamente a una serie de fiestas paganas que se celebraban desde muy antiguo en el mes de mayo.
De todas las celebraciones clásicas con las que se quiere relacionar a las fiestas de mayo, la que más nos interesa es la de Attis. Según Ovidio, Attis era un hermoso joven que vivía en los bosques de Frigia. La diosa Cibeles lo eligió para sí, haciéndolo guardián de su templo, pero con la condición de que se mantuviera siempre virgen. Attis cedió al amor de la ninfa Sagaritis y entonces Cibele hizo que ésta muriera, derribando el árbol del que dependía su vida. El muchacho enloqueció y se castró, tras lo cual la diosa lo volvió a admitir en su templo. La fiesta, rememorando su muerte y resurrección, tenía lugar en el equinoccio de primavera. Comenzaba el 22 de marzo con la solemne procesión de un pino recién cortado (árbol en el que, según la leyenda, se había convertido Attis a su muerte), al que se adornaba con guirnaldas de violetas y bandas de lana. Los ritos proseguían hasta el día 27 y en ellos se incluían prácticas mistéricas y automutilaciones.
Aunque se puede apreciar una cierta semejanza o paralelismo entres estas celebraciones y nuestras fiestas de mayo, es difícil, sin embargo, admitir una relación de dependencia de éstas con respecto a aquéllas y más bien habría que hablar de una génesis espontánea común, a partir de los fenómenos culturales recurrentes de adoración al árbol y exaltación de la naturaleza. Por ello mismo, hay que concluir que el sentido de estas fiestas es plenamente naturalista: saludo a la primavera, celebración del comienzo de un nuevo ciclo de la vegetación, agradecimiento a la naturaleza por sus futuras cosechas. Y, como consecuencia de ello, exaltación del amor y de los sentimientos humanos más espontáneos.
En definitiva, no es posible negar la conexión entre las fiestas paganas de la naturaleza y la celebración de la Cruz de Mayo, así como la anterioridad cronológica del mayo. Quizás lo justo sería hablar de que la fiesta de la Cruz, cuando comenzó a desarrollarse popularmente, tomó elementos de otras fiestas no religiosas, en un intento de asimilarlas para eliminarlas o sencillamente como consecuencia inevitable de su coexistencia, dada la similitud de sus motivaciones. La prohibición de las fiestas paganas por parte de las autoridades civiles y eclesiásticas facilitó esa incorporación de elementos de unas a otra, aleccionada por el pueblo, siempre amante de sus tradiciones y nunca dispuesto a perderlas. El fondo, lo popular, habría quedado intacto y sólo habría cambiado su apariencia externa.
SAN FELIPE Y SANTIAGO APÓSTOLES
- Biografía de San Felipe y Santiago, Apóstoles
- Oración a San Felipe Apóstol
- San Felipe Apóstol en la Enciclopedia Católica
- San Santiago Apóstol en la Enciclopedia Católica
SAN ATANASIO DE ALEJANDRÍA
Atanasio, nombre que significa "inmortal", nació en Egipto, en la ciudad de Alejandría, en el año 295. Llegado a la adolescencia, estudió derecho y teología. Se retiró por algún tiempo a un yermo para llevar una vida solitaria y allí hizo amistad con los ermitaños del desierto; cuando volvió a la ciudad, se dedicó totalmente al servicio de Dios.
SAN JOSÉ OBRERO - MAYO MES DE MARÍA
Hoy la Iglesia recuerda, en el día de los trabajadores, a san José, obrero.
Pablo VI se ha expresado al respecto: "Vosotros, los hijos del trabajo, que durante siglos habéis sido los esclavos de la labor, buscad a aquel que declara que la vida es sagrada, que el obrero es libre de las cadenas que la primacía del materialismo y del egoísmo económico ha soldado no sólo en torno de los puños de los trabajadores, sino en torno de su corazón y de su espíritu... Buscad un principio, una razón que haga a los hombres iguales, solidarios entre sí, y que les devuelva la fraternidad. Y ello no en el odio contra otros hombres... Ya que todos viven en una comunidad natural, que traten de formar una sociedad humana y que sientan la grandeza de ser un pueblo".
El mundo humano es el mundo del trabajo, hecho por la inteligencia, a través de las manos que en medio de la naturaleza señalaron el camino del progreso y la cultura. Dios concedió manos a otras especies, pero sólo a la mano del hombre le dio el carácter de herramienta. Toda la técnica sobre la cual se asienta la civilización es prolongación de esa mano que Dios otorgó al hombre.
Hoy celebramos al padre nutricio de Jesús, justo y humilde carpintero de Nazaret, que pasa la vida no sólo en la meditación y la oración, sino también en las fatigas de su artesanía. José es el símbolo de la prudencia, del silencio, de la generosidad, de la dignidad y de la aplicación en el trabajo; también lo es de los derechos y de los deberes respecto del trabajo.
San José fue un auténtico obrero en el pleno sentido de la palabra, y el único hombre que compartió con el Hijo de Dios la tarea de todos los días.
Recordamos hoy a todos los trabajadores de nuestra patria y del mundo, pidiendo al cielo para que sean instrumento de paz, de evangelización, de serena inteligencia, de valor y de confianza en sí mismos, de esperanzas de bien y de fervientes voluntad, dignos y sin retaceos en la hermandad de los hombres. Hoy la Iglesia recuerda, en el día de los trabajadores, a san José, obrero.
Juan Pablo II enseña que los hombres descubren pronto la cruz en su trabajo; precisamente por ello el esfuerzo humano es redentor, pues Cristo lo ha unido a su pasión: también él fue obrero y predicó su evangelio del trabajo conociendo íntimamente esta realidad que tiene por protagonistas a todos los hombres y mujeres del mundo.
Mayo siempre será un mes especial: es el mes que la Iglesia
dedica a la Bienaventurada Virgen María, Madre de Dios y madre nuestra.
El mes que hoy empieza ha de ser tiempo propicio para
renovar el amor que todos los bautizados debemos profesar a la mujer que Dios
eligió -desde la eternidad- para ser madre de su Hijo, Jesucristo, el Verbo
hecho carne para redención del género humano. ¡Cómo no volver la mirada hacia
Ella, que nos mira primero con dulzura y compasión! No es casualidad que Dios
haya querido crecer al calor de una madre como María y recibir sus amorosos
cuidados.
Primer día: El mes de María
Segundo día: La devoción a la Santísima Virgen
Tercer día: Las letanías de la Santísima Virgen
Cuarto día: Explicación de las letanías
Quinto día: Explicación de las letanías
Sexto día: Explicación de las letanías
Séptimo día: Explicación de las letanías
Octavo día: Explicación de las letanías
Noveno día: Explicación de las letanías
Décimo día: Explicación de las letanías
Décimo primer día: Explicación de las letanías
Décimo segundo día: Explicación de las letanías
Décimo tercer día: Explicación de las letanías
Décimo cuarto día: Explicación de las letanías
Décimo quinto día: Explicación de las letanías
Décimo sexto día: Explicación de las letanías
Décimo séptimo día: Explicación de las letanías
Décimo octavo día: Explicación de las letanías
Décimo noveno día: Explicación de las letanías
Vigésimo día: Explicación de las letanías
Vigésimo primer día: Explicación de las letanías
Vigésimo segundo día: Explicación de las letanías
Vigésimo tercer día: Explicación de las letanías
Vigésimo cuarto día: Explicación de las letanías
Vigésimo quinto día: Explicación de las letanías
Vigésimo sexto día: Explicación de las Letanías
Vigésimo séptimo día: Explicación de las letanías
Vigésimo octavo día: Explicación de las letanías
Vigésimo noveno día: Explicación de las letanías
Trigésimo día: El Ave María, el Ángelus
Trigésimo primer día: Oraciones a la Santísima Virgen
30 de abril de 2025
SAN PÍO V
Miguel Ghislieri nació en 1504 en Bosco, en la diócesis de Tortona y tomó el hábito de Santo a los 14 años en el convento de Voghera. En 1556, fue elegido obispo de Nepi y Sutri y al año siguiente, fue nombrado, Inquisidor General y Cardenal. El santo tomó el nombre de Pío V desde el primer momento de su Pontificado (1565) y puso de manifiesto que estaba decidido aplicar no solo la letra sino también el espíritu del Concilio de Trento. En 1568 se publicó en nuevo Breviario, en el cual se omitía las fiestas y extravagantes leyendas de algunos santos y se daba a las lecciones de la Sagrada Escritura su verdadero lugar. Además, se terminó el catecismo que el Concilio de Trento había mandado a redactar y el Pontífice mandó a traducirlo en diferentes lenguas.
El éxito del Papa se debió en gran parte, a la veneración que el pueblo le profesaba por su santidad; su oración era fervorosa y frecuentemente visitaba a los hospitales y asistía personalmente a los enfermos. Sin embargo, durante su pontificado, el Papa tuvo que enfrentar dos grandes amenazas: la difusión del protestantismo y las invasiones de los turcos, frente a lo cual trabajó incansablemente. En 1572, el Papa sufrió el violento ataque de una dolorosa enfermedad que le produjo la muerte el 1 de mayo del mismo año, a los 68 años de edad.
29 de abril de 2025
SANTA CATALINA DE SIENA
Santa Catalina nació en 1347 en Siena, hija de padres virtuosos y piadosos. Ella fue favorecida por Dios con gracias extraordinarias desde una corta edad, y tenía un gran amor hacia la oración y hacia las cosas de Dios. A los siete años, consagró su virginidad a Dios a través de un voto privado. A los doce años, la madre y la hermana de Santa Catalina intentaron persuadirla para llegar al matrimonio, y así comenzaron a alentarla a prestar más atención a su apariencia. Para complacerlos, ella se vestía de gala y se engalanaba con joyas que se estilaban en esa época. Al poco tiempo, Santa Catalina se arrepintió de esta vanidad. Su familia consideró la soledad inapropiada para la vida matrimonial, y así comenzaron a frustrar sus devociones, privándola de su pequeña cámara o celda en la cual pasaba gran parte de su tiempo en soledad y oración. Ellos le dieron varios trabajos duros para distraerla. Santa Catalina sobrellevó todo esto con dulzura y paciencia. El Señor le enseñó a lograr otro tipo de soledad en su corazón, donde, entre todas sus ocupaciones, se consideraba siempre a solas con Dios, y donde no podía entrar ninguna tribulación.
Más adelante, su padre aprobó finalmente su devoción y todos sus deseos piadosos. A los quince años de edad, asistía generosamente a los pobres, servía a los enfermos y daba consuelo a los afligidos y prisioneros. Ella prosiguió el camino de la humildad, la obediencia y la negación de su propia voluntad. En medio de sus sufrimientos, su constante plegaria era que dichos sufrimientos podían servir para la expiación de sus faltas y la purificación de su corazón.
- Celebraciones esponsales con Jesús
- Servicio al Prójimo
- Una conciliadora para la Iglesia
- Fin de su vida
- Oración a Santa Catalina de Siena
- Santa Catalina de Siena en la Enciclopedia Católica
28 de abril de 2025
SAN PEDRO CHANEL
27 de abril de 2025
DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA
"La humanidad no conseguirá la paz hasta que no se
dirija con confianza a Mi misericordia" (Diario, 300)
La Fiesta de la Divina Misericordia tiene como fin principal
hacer llegar a los corazones de cada persona el siguiente mensaje: Dios es
Misericordioso y nos ama a todos ... "y cuanto más grande es el pecador,
tanto más grande es el derecho que tiene a Mi misericordia" (Diario, 723).
En este mensaje, que Nuestro Señor nos ha hecho llegar por medio de Santa
Faustina, se nos pide que tengamos plena confianza en la Misericordia de Dios,
y que seamos siempre misericordiosos con el prójimo a través de nuestras
palabras, acciones y oraciones... "porque la fe sin obras, por fuerte que
sea, es inútil" (Diario, 742).
Con el fin de celebrar apropiadamente esta festividad, se
recomienda rezar la Coronilla y la Novena a la Divina Misericordia; confesarse
-para la cual es indispensable realizar primero un buen examen de conciencia-,
y recibir la Santa Comunión el día de la Fiesta de la Divina Misericordia.
La esencia de la devoción:
La esencia de la devoción se sintetiza en cinco puntos
fundamentales:
1. Debemos confiar en la Misericordia del Señor.
Jesús, por medio de Sor Faustina nos dice: "Deseo
conceder gracias inimaginables a las almas que confían en mi misericordia. Que
se acerquen a ese mar de misericordia con gran confianza. Los pecadores
obtendrán la justificación y los justos serán fortalecidos en el bien. Al que
haya depositado su confianza en mi misericordia, en la hora de la muerte le
colmaré el alma con mi paz divina".
2. La confianza es la esencia, el alma de esta devoción y a
la vez la condición para recibir gracias.
"Las gracias de mi misericordia se toman con un solo
recipiente y este es la confianza. Cuanto más confíe un alma, tanto más
recibirá. Las almas que confían sin límites son mi gran consuelo y sobre ellas
derramo todos los tesoros de mis gracias. Me alegro de que pidan mucho porque
mi deseo es dar mucho, muchísimo. El alma que confía en mi misericordia es la
más feliz, porque yo mismo tengo cuidado de ella. Ningún alma que ha invocado
mi misericordia ha quedado decepcionada ni ha sentido confusión. Me complazco
particularmente en el alma que confía en mi bondad".
3. La misericordia define nuestra actitud ante cada persona.
"Exijo de ti obras de misericordia que deben surgir del
amor hacia mí. Debes mostrar misericordia siempre y en todas partes. No puedes
dejar de hacerlo ni excusarte ni justificarte. Te doy tres formar de ejercer
misericordia: la primera es la acción; la segunda, la palabra; y la tercera, la
oración. En estas tres formas se encierra la plenitud de la misericordia y es
un testimonio indefectible del amor hacia mí. De este modo el alma alaba y
adora mi misericordia".
4. La actitud del amor activo hacia el prójimo es otra condición
para recibir gracias.
"Si el alma no practica la misericordia de alguna
manera no conseguirá mi misericordia en el día del juicio. Oh, si las almas
supieran acumular los tesoros eternos, no serían juzgadas, porque la misericordia
anticiparía mi juicio".
5. El Señor Jesús desea que sus devotos hagan por lo menos
una obra de misericordia
al día.
"Debes saber, hija mía que mi Corazón es la
misericordia misma. De este mar de misericordia las gracias se derraman sobre
todo el mundo. Deseo que tu corazón sea la sede de mi misericordia. Deseo que
esta misericordia se derrame sobre todo el mundo a través de tu corazón.
Cualquiera que se acerque a ti, no puede marcharse sin confiar en esta
misericordia mía que tanto deseo para las almas".
La Santa Sede decreta día de la Divina Misericordia
Una propuesta de Santa Faustina Kowalska
La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los
Sacramentos publicó el 23 de mayo del 2000 un decreto en el que se establece,
por indicación de Juan Pablo II, la fiesta de la Divina Misericordia, que
tendrá lugar el segundo domingo de Pascua. La denominación oficial de este día
litúrgico será «segundo domingo de Pascua o de la Divina Misericordia».
Ya el Papa lo había anunciado durante la canonización de Sor
Faustina Kowalska, el 30 de abril: «En todo el mundo, el segundo domingo de
Pascua recibirá el nombre de domingo de la Divina Misericordia. Una invitación
perenne para el mundo cristiano a afrontar, con confianza en la benevolencia
divina, las dificultades y las pruebas que esperan al género humano en los años
venideros».
Sin embargo, el Papa no había escrito estas palabras, de
modo que no aparecieron en la transcripción oficial de sus discursos de esa
canonización.
Santa Faustina, que es conocida como la mensajera de la
Divina Misericordia, recibió revelaciones místicas en las que Jesús le mostró
su corazón, fuente de misericordia y le expresó su deseo de que se estableciera
esta fiesta. El Papa le dedicó una de sus encíclicas a la Divina Misericordia
(«Dives in misericordia»).
Los apóstoles de la Divina Misericordia están integrados por
sacerdotes, religiosos y laicos, unidos por el compromiso de vivir la
misericordia en la relación con los hermanos, hacer conocer el misterio de la
divina misericordia, e invocar la misericordia de Dios hacia los pecadores.
Esta familia espiritual, aprobada en 1996, por la archidiócesis de Cracovia,
está presente hoy en 29 países del mundo.
El decreto vaticano aclara que la liturgia del segundo
domingo de Pascua y las lecturas del breviario seguirán siendo las que ya
contemplaba el misal y el rito romano.
NUESTRA SEÑORA DE NONTSERRAT
La Virgen de Montserrat, conocida popularmente como "La Moreneta" es la patrona de Cataluña y es una de las siete Patronas de las Comunidades Autónomas de España. Está situada en el Monasterio de Montserrat, es un símbolo para Cataluña y se ha convertido en un punto de peregrinaje para creyentes y de visita obligada para los turistas.
Según la leyenda, la primera imagen de la Virgen de Montserrat la encontraron unos niños pastores en el año 880. Tras ver una luz en la montaña, los niños encontraron la imagen de la Virgen en el interior de una cueva. Al enterarse de la noticia el obispo, intentó trasladar la imagen hasta la ciudad de Manresa pero el traslado fue imposible ya que la estatua pesaba demasiado. El obispo lo interpretó como el deseo de la Virgen de permanecer en el lugar en el que se la había encontrado y ordenó la construcción de la ermita de Santa María, origen del actual monasterio.
La imagen que en la actualidad se venera es una talla románica del siglo XII realizada en madera de álamo. Representa a la Virgen con el niño sentado en su regazo y mide unos 95 centímetros de altura. En su mano derecha sostiene una esfera que simboliza el universo; el niño tiene la mano derecha levantada en señal de bendición mientras que en la mano izquierda sostiene una piña.
Con excepción de la cara y de las manos de María y el niño, la imagen es dorada. La Virgen, sin embargo, es de color negro, lo que le ha dado el apelativo popular de La Moreneta (la morenita). Pertenece al grupo de las llamadas virgen negra que tanto se extendió por la Europa románica y cuyo significado ha dado lugar a múltiples estudios. Si bien en este caso su color parece ser el resultado de la transformación del barniz de su cara y de sus manos a causa del paso del tiempo.
El 11 de septiembre de 1844, el Papa León XIII declaró oficialmente a la Virgen de Montserrat como patrona de la diócesis de Cataluña. Se le concedió también el privilegio de tener misa y oficios propios. Su festividad se celebra el 27 de abril.
La Virgen de Montserrat fue la primera imagen mariana de España en recibir la Coronación Canónica ya en 1881, seguida de la Virgen de la Merced de Barcelona (1886), la Virgen de la Candelaria de Tenerife, Patrona de Canarias (1889), la Virgen de los Reyes de Sevilla (1904) y la Virgen de la Misericordia de Reus (1904).
A la Virgen de Montserrat se la conoce popularmente como "La Moreneta" (La Morenita). En España existen otras vírgenes negras conocidas con el nombre de "morenita" o "moreneta", como la Virgen de Lluc (Mallorca) o la Virgen de Candelaria (Tenerife).
Más réplicas de la imagen se encuentran en Canarias (España), Perú, Guatemala, Colombia, El Salvador, Venezuela, Brasil, México y Argentina.
MISA FUNERAL DEL PAPA FRANCISCO
Con la Misa funerales celebrada hoy, 26 de abril, a las 10,
en la escalinata de la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco es saludado
como pastor y discípulo de Cristo. Este rito funerario pretende expresar la fe
de la Iglesia en Cristo resucitado. Presidiendo la misma, en latín y según lo
previsto en el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis en la nueva edición de 2024
con las simplificaciones queridas por el Papa Bergoglio, está el decano del
Colegio Cardenalicio, el cardenal Giovanni Battista Re. Hay 980 concelebrantes,
entre cardenales, obispos y sacerdotes, además hay 200 ministros de la Comunión
y más de 4 mil sacerdotes en el lado derecho del atrio, donde se encuentra la
estatua de San Pedro. Se prepararon 225 copones para los fieles, mientras que
para los sacerdotes se prepararon 80 cálices y el mismo número de copones.
Frente al altar, a la derecha, el icono de la Salus Populi Romani .
Las 6 oraciones de los fieles se leen en francés, árabe,
portugués, polaco, alemán y chino y después de la Comunión se tiene la Ultima
commendatio la recomendación final a
Dios para acoger el alma del difunto en la gloriosa comunión de los santos, y
la Valedictio , la despedida, o último saludo antes del entierro, con la
Súplica de la Iglesia de Roma seguida de la oración pronunciada por el cardenal
Baldassare Reina, vicario general de la diócesis de Roma, y, en griego, la
Súplica de las Iglesias Orientales, y la posterior oración del Patriarca de
Antioquía de los greco-melquitas Youssef Absi. Al final, el cardenal Re rocía
agua bendita e inciensa el ataúd, que luego es trasladado a la Basílica de San
Pedro y desde allí, con una procesión fúnebre, a la Basílica de Santa María la
Mayor para el entierro. La procesión sale del Estado de la Ciudad del Vaticano
por la Porta del Perugino, luego pasa por la Galería Príncipe Amadeo de Saboya-Aosta
y continúa por Corso Vittorio Emanuele. Una vez que llegue a Piazza Venezia,
gira hacia Via dei Fori Imperiali, llegua al Coliseo y continúe por Via
Labicana y Via Merulana hasta llegar a Piazza Santa Maria Maggiore.
La sepultura en el nicho de la nave lateral de la basílica
liberiana, entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, está precedida por el
canto de 4 salmos y acompañada de 5 intercesiones, luego se entona el
Padrenuestro . Después de la oración final, sobre el féretro que contiene los
restos del Papa Francisco se imprimieron los sellos del Cardenal Camarlengo de
la Santa Iglesia Romana, Kevin Joseph Farrell, de la Prefectura de la Casa
Pontificia, de la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas del Romano Pontífice
y del Capítulo Liberiano. Una vez concluidos estos gestos, se coloca el féretro
en el sepulcro y se rocía con agua bendita mientras se entona el Regina Caeli .
Luego viene la última formalidad: el notario del Capítulo Liberiano redacta el
acta auténtica que certifica el entierro y la lee a los presentes. Luego lo
firman el Cardenal Camarlengo, el Regente de la Casa Pontificia, Monseñor
Leonardo Sapienza, el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias,
Monseñor Diego Ravelli y finalmente el notario.