19 de marzo de 2023

IV DOMINGO DE CUARESMA - CICLO A

En el cuarto domingo de cuaresma el color litúrgico cambia el morado por el rosa. Se trata del Domingo Laetare, o Domingo de la Alegría. Es un modo a través del cual la Iglesia anima a sus fieles a culminar el período de penitencia cuaresmal pensando en la alegría de la resurrección de Cristo. Se llama Domingo de la Alegría porque así comienza el introito de la misa: “Alégrate Jerusalén”.

 

"Y tú, ¿Qué dices del que te ha abierto los ojos?"


Odres Nuevos - IV Domingo Cuaresma 2023

Lectura del santo evangelio según San Juan (9,1.6-9.13-17.34-38):

En aquel tiempo, al pasar Jesús vio a un hombre ciego de nacimiento. Y escupió en tierra, hizo barro con la saliva, se lo untó en los ojos al ciego y le dijo: «Ve a lavarte a la piscina de Siloé (que significa Enviado).»
Él fue, se lavó, y volvió con vista. Y los vecinos y los que antes solían verlo pedir limosna preguntaban: «¿No es ése el que se sentaba a pedir?»
Unos decían: «El mismo.»
Otros decían: «No es él, pero se le parece.»
Él respondía: «Soy yo.»
Llevaron ante los fariseos al que había sido ciego. Era sábado el día que Jesús hizo barro y le abrió los ojos. También los fariseos le preguntaban cómo había adquirido la vista.
Él les contestó: «Me puso barro en los ojos, me lavé, y veo.»
Algunos de los fariseos comentaban: «Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.»
Otros replicaban: «¿Cómo puede un pecador hacer semejantes signos?»
Y estaban divididos. Y volvieron a preguntarle al ciego: «Y tú, ¿qué dices del que te ha abierto los ojos?»
Él contestó: «Que es un profeta.»
Le replicaron: «Empecatado naciste tú de pies a cabeza, ¿y nos vas a dar lecciones a nosotros?»
Y lo expulsaron.
Oyó Jesús que lo habían expulsado, lo encontró y le dijo: «¿Crees tú en el Hijo del hombre?»
Él contestó: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?»
Jesús le dijo: «Lo estás viendo: el que te está hablando, ése es.»
Él dijo: «Creo, Señor.» Y se postró ante él. 
Palabra del Señor

Evangelio Comentado por:
José Antonio Pagola
Gruposdejesus.com
Jn (9,1.6-9.13-17.34-38)

CAMINOS HACIA LA FE

El relato es inolvidable. Se le llama tradicionalmente la «curación del ciego de nacimiento», pero es mucho más, pues el evangelista nos describe el recorrido interior que va haciendo un hombre perdido en tinieblas hasta encontrarse con Jesús, «Luz del mundo».

No conocemos su nombre. Solo sabemos que es un mendigo, ciego de nacimiento, que pide limosna en las afueras del Templo. No conoce la luz. No la ha visto nunca. No puede caminar ni orientarse por sí mismo. Su vida transcurre en tinieblas. Nunca podrá conocer una vida digna.

Un día Jesús pasa por su vida. El ciego está tan necesitado que deja que le trabaje sus ojos. No sabe quién es, pero confía en su fuerza curadora. Siguiendo sus indicaciones, limpia su mirada en la piscina de Siloé y, por primera vez, comienza a ver. El encuentro con Jesús va a cambiar su vida.

Los vecinos lo ven transformado. Es el mismo, pero les parece otro. El hombre les explica su experiencia: «Un hombre que se llama Jesús» lo ha curado. No sabe más. Ignora quién es y dónde está, pero le ha abierto los ojos. Jesús hace bien incluso a aquellos que solo lo reconocen como hombre.

Los fariseos, entendidos en religión, le piden toda clase de explicaciones sobre Jesús. Él les habla de su experiencia: «Solo sé una cosa: que era ciego y ahora veo». Le preguntan qué piensa de Jesús, y él les dice lo que siente: «Que es un profeta». Lo que ha recibido de él es tan bueno que ese hombre tiene que venir de Dios. Así vive mucha gente sencilla su fe en Jesús. No saben teología, pero sienten que ese hombre viene de Dios.

Poco a poco, el mendigo se va quedando solo. Sus padres no lo defienden. Los dirigentes religiosos lo echan de la sinagoga. Pero Jesús no abandona a quien lo ama y lo busca. «Cuando oyó que lo habían expulsado, fue a buscarlo». Jesús tiene sus caminos para encontrarse con quienes lo buscan. Nadie se lo puede impedir.

Cuando Jesús se encuentra con aquel hombre a quien nadie parece entender, solo le hace una pregunta: «¿Crees en el Hijo del hombre?», ¿crees en el Hombre nuevo, el Hombre plenamente humano precisamente por ser encarnación del misterio insondable de Dios? El mendigo está dispuesto a creer, pero se encuentra más ciego que nunca: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?».

Jesús le dice: «Lo estás viendo: el que te está hablando, ese es». Al ciego se le abren ahora los ojos del alma. Se postra ante Jesús y le dice: «Creo, Señor». Solo escuchando a Jesús y dejándonos conducir interiormente por él vamos caminando hacia una fe más plena y también más humilde.

SAN JOSÉ

La Solemnidad de San José se celebra el día 19 de marzo; sin embargo, este año 2023, ha sido trasladada al 20 del presente, por haber coincidido con el IV Domingo de Cuaresma.

 




En el Plan Reconciliador de Dios, San José tuvo un papel esencial: Dios le encomendó la gran responsabilidad y privilegio de ser el padre adoptivo del Niño Jesús y de ser esposo virginal de la Virgen María. San José, el santo custodio de la Sagrada Familia, es el santo que más cerca está de Jesús y de la Santísima de la Virgen María.

San Mateo (1,16) llama a San José el hijo de Jacob; según San Lucas (3,23), su padre era Helí. Probablemente nació en Belén, la ciudad de David del que era descendiente. Al comienzo de la historia de los Evangelios (poco antes de la Anunciación), San José vivía en Nazaret.

Según San Mateo 13,55 y Marcos 6,3, San José era un "tekton". La palabra significa en particular que era carpintero o albañil. San Justino lo confirma, y la tradición ha aceptado esta interpretación.

Nuestro Señor Jesús fue llamado "Hijo de José", "el carpintero" (Jn 1,45; 6,42; Lc 4,22).

Como sabemos no era el padre natural de Jesús, quién fue engendrado en el vientre virginal de la Virgen María por obra del Espíritu Santo y es Hijo de Dios, pero José lo adoptó amorosamente y Jesús se sometió a él como un buen hijo ante su padre. ¡Cuánto influenció José en el desarrollo humano del niño Jesús! ¡Qué perfecta unión existió en su ejemplar matrimonio con María!

San José Obrero

San José, Casto Custodio








 



  


 





CELEBRACIÓN DEL DÍA DEL PADRE


Este lunes 19 de marzo se celebra el Día del Padre o de San José. Este año solo será festivo en la Comunidad Valenciana y Murcia, de tal forma que en el resto de España es  laborable. Precisamente esta festividad se considera uno de los día sustituibles dentro del calendario laboral, es decir, que cada comunidad autónoma ha podido sustituirlo por otras festividades. Pero, ¿por qué se celebra en España el Día de San José?
En el caso de nuestro país, la fecha escogida - mañana 19 de marzo- coincide en la tradición católica con la festividad de San José, esposo de la Virgen María y padre de Jesús. Una conmemoración a la que se le dio la relevancia actual a partir del 1621, por mandato del Papa Pío IX que lo proclamó Patrono Universal de la Iglesia. Por su parte, Juan XXIII (1959-1963) lo incluyó dentro del canon de la misa.
Más recientemente, lo que se conoce actualmente como el Día del Padre, se remonta a la iniciativa de una maestra del barrio madrileño de Vallecas - Manuela Vicente Ferrero- quien a imitación del Día de la Madre, también decidió que los hombres con familia merecían un reconocimiento a su labor. Lo que plasmó en un artículo en el periódico «El Magisterio Español» al año siguiente, publicación en la que colaboraba bajo el seudónimo de Nely.
A través de este medio, esta maestra exaltó en su escrito las virtudes del padre de Jesús y recordó que los padres, como San José, eran el «instrumento de la voluntad de Dios». En este sentido, animaba a los hijos a que se mostraran agradecidos a sus progenitores y sus compañeros de profesión a impulsar esta iniciativa. La propia Manuela predicó con el ejemplo y celebró un primer Día del Padre en el colegio madrileño donde daba clase en 1948.

Dedicado a todos los padres 









¡¡¡FELICIDADES A TODOS LOS QUE HOY CELEBRAN SU ONOMÁSTICA!!!.
 EN ESPECIAL FELICITAMOS A NUESTRO MAESTRO: JOSÉ GONZÁLEZ  AUÑÓN, TUTOR DE 6ºB y JEFE DE ESTUDIOS DE NUESTRO CENTRO



SAN SALVADOR DE HORTA

 (1520-1567).



Martirologio Romano: En Cagliari, en Cerdeña, san Salvador Grionesos de Horta, religioso de la Orden de los Hermanos Menores, que para la salvación de cuerpos y almas se hizo humilde instrumento de Cristo.

Se llamaba Alfonso y nació en Santa Coloma de Farnés (Gerona), en el seno de una familia muy modesta de labradores, posiblemente de origen sardo, que el momento de su nacimiento trabajaban en un hospital benéfico, y así aprendió de ellos a aliviar a los que sufren. Al quedarse huérfano se trasladó a los alrededores de Barcelona, y allí fue payés; luego marchó a Montserrat donde maduró su vocación e ingresó como lego (ya que era totalmente ignorante) en el convento franciscano de Jesús. Se inmoló por las almas mediante las prácticas penitenciales y la humildad. Fue hortelano, cocinero, portero, limosnero, sacristán. Fue siempre un ejemplo vivo de piedad, humildad y de alegre despreocupación, que perturbaron a sus superiores, como cuando los ángeles prepararon para él la mejor de las cenas, mientras se encontraba orando.

No tardó en ir de convento en convento, entre ellos el de Horta de San Juan en Tarragona, porque era engorroso para todas las comunidades por su poder taumatúrgico. Se le prohibió que hiciera milagros (pero fue en vano, porque era involuntario e incontenible), se amotinaron los fieles cuando no le dejaban aparecer en público. Le trasladaron al convento de Reus. Fue procesado por la Inquisición que le declaró perfectamente ortodoxo y el propio Felipe II quiso conocerle, a lo que él respondió: "¿Qué ganaréis con el ver a un pobre cocinero del padre san Francisco?". Fue enviado al convento de Jesús extramuros de Barcelona. Se le sometió a prácticas de exorcismo para quitarle el demonio, que se pensaba que tenía. San Carlos de Sezze, se hizo franciscano para imitarlo. Murió en Cágliari en Cerdeña. Fue canonizado por SS. Pío XI el 17 de abril de 1938.