3 de marzo de 2013

Tercer Domingo de Cuaresma - Ciclo C

En el evangelio de hoy:

Jesús empieza al principio del capítulo a rebatir la idea que muchos judíos tienen que
cuando una calamidad pasa es el castigo de Dios sobre nosotros.
Esta parábola también enfatiza que Dios es un Dios misericordioso. Él no quiere cortar la higuera sin darle más tiempo para producir fruto. Dios tiene mucha paciencia y quiere dar a todos nosotros el suficiente tiempo para confiar en Él. Pero al final, el tiempo se acaba y la decisión para aceptarlo no se nos es ofrecida. Por eso, es muy importante hacer una decisión para Cristo antes de que no tengamos otra oportunidad.



Continuamos en este camino de conversión que nos marca la Iglesia, y pedimos a Dios nos siga dando fuerzas para intensificar nuestra oración, el ayuno y la caridad con la limosna. 


Las lecturas de hoy nos describen algunos rasgos del Dios cristiano.
Dios es fuego que no se consume
Dios se define a si mismo como EL QUE ES.
Un Dios que anhela la conversión del hombre.
Un Dios paciente, que sabe esperar.




No hay comentarios: